Hace tiempo que no recordaba un dicho que mi “avi Pep” decía cuando quería indicar, a su parecer, que una persona era y se comportaba de forma que molestaba, incorrecta, esquizofrénica, casi psicópata y hasta el punto de poder ser peligrosa por sus actos: decía "aquest ximple s 'ha tornat boix" (este estúpido, se ha vuelto loco). Esta frase corta, pero contundente, le adjudicaba la estupidez de nacimiento y la locura adquirida en el transcurso de su vida.
Sólo en un par de ocasiones, seriamente, pensé en alguien: uno fue el dictador de Libia y el otro fue Kruschev en la crisis de los misiles en Cuba ( a buen seguro, habrá habido bastantes más).
Pues bien, en estos días, he vuelto a recordar la adjudicación de esta frase, cuando leo y escucho la trayectoria que ha iniciado el Sr. Trump en las pocas semanas de su mandato como presidente de EE.UU.
En principio sus mensajes de campaña, me parecían bravatas para llegar a una parte ultraconservadora de la ciudadanía y lo consiguió porque finalmente ganó las elecciones. Pero pensé que ya ganadas, la moderación y el buen sentido, sustituirían, por lo menos en parte, lo que fueron sus propuestas xenófobas, machistas y racistas y capaz de dejar a más de 20 millones de ciudadanos sin ningún tipo de cobertura médico-social, pero sin embargo dedicar, adicionalmente, más de 50 mil millones de dólares, al presupuesto de defensa, entre otras cosas.
En las pocas semanas transcurridas, no sólo no ha rectificado su posición, sino que está creando gran preocupación, en general por su actitud belicista y amenazante, sus desplantes a jefes de gobierno, y parece que una vinculación demasiado cercana con los rusos, implicando, sin pruebas, a su antecesor.En fin, que puedo decir que no sepáis, pero es más que preocupante que un personaje de estas características, pueda tener en sus manos, la posibilidad de crear un conflicto de proporciones desconocidas.
El perfil y actitud, encajan perfectamente con las de un dictador/déspota, que se cubre con una nube de miedo, angustia y temor para tener a la gente sin chistar, "acollonida", pero que casi siempre tiene que hacer ruido para esconder pasados turbios, pero que con el tiempo, terminan por aflorar. Creo que el Sr. Trump, tiene bastante “mierda” debajo de su alfombra.
Espero que los miembros del Congreso, incluídos los de su propio partido, se den cuenta de a quien tienen como jefe, afortunadamente sin poderes para dar órdenes ni tomar determinadas decisiones, sin contar con la aprobación de una mayoría que creo está pensando en la aplicación de un “impeachment” y mandarlo a su casa, con la probabilidad de que esto dé un disgusto a Melania, su esposa, que parece prefiere tenerle lejos. Aunque con las casas tan grandes que tiene, pueden vivir bajo el mismo techo y pasar días sin verlo.Así que aplica perfectamente la “sentencia” de mi "avi Pep” :
"ESTE ESTUPIDO SE HA VUELTO LOCO”. O así me lo parece.
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