Queridos amigos:
Hace meses que no escribía nada en mi "blog" y es que para mí, escribir es transmitir un estado de ánimo que viene de un sin fin de circunstancias: personales, familiares, del entorno, del diario vivir, etc.
Como no escribo profesionalmente, sino que lo hago como si al escribir pensara en voz alta y así compartir con quien me quiera leer, en realidad es un pensamiento plasmado en un escrito, en vez de hacerlo en una conversación.
Los que escriben por obligación -profesionales-, no les queda otra que, con inspiración o sin ella, deban entregarse forzosamente a su trabajo, que realizan mediante la escritura. Otros -escritores de libros y no de noticias- pueden permitirse la libertad de esperar a que fluya la inspiración para inventar el texto que quieren plasmar en su libro, ensayo o lo que fuere.Como ya he comentado, la inspiración me llega de mis vivencias y la situación del entorno y en estos últimos meses no propiciaron el deseo de sentarme frente a la computadora. Las noticias en general, eran/son de penalidades, de sufrimiento, de incompresión, de desastres, de violencia, de atentados, etc.etc. y, ojalá y me equivoque, creo que quedan por ocurrir en Europa, situaciones muy violentas y dolorosas.
Nunca sentí la alegría que me proporcionara la noticia de que se hubiera descubierto una vacuna contra el cáncer, o que los emigrantes fuesen rapatriados a sus países porque la situación había cambiado favorablemente para ellos, o que se había llegado a un acuerdo internacional para combatir el hambre en Africa ú otros continentes, donde desgraciadamente mueren niños por no haber tenido la suerte de nacer en otros lugares, etc. No vi (o no supe ver), nada que me proporcionara la condición positiva para expresar y compartir en mi "blog".
En mi caso, además, se le sumaba que mi hija menor, Camille, iba a realizar un intercambio de su universidad - UPI- con la Complutense de Madrid durante un semestre para tomar clases de mercadeo, diseño gráfico y educación social.
Nunca nos habíamos separado y esta primera vez sería por 6 MESES y ya intuí que me iba a ser duro soportar su ausencia....y así fue.
Los primeros días, compartía con ella el descubrimiento que iba haciendo todos los días de su nuevo lugar de residencia, de sus clases, sus compañeros, etc., pero cada día se me añadía un poco más de sensación de vacío, de inquietud, de preocupación, además de por su ausencia, por todo lo que estaba ocurriendo en Europa. Se dio la situación que estando en París, había ocurrido días antes, el atentado en la sala Bataclan. Días después, en Bélgica, la masacre del aeropuerto y la detención de varios terroristas, en Turquía varios atentados, etc. etc. y como estaba viajando por diferentes países, me creaba ansiedad adicional, aunque eran viajes de corta duración: en algunos casos, tenía "pis" en Francia e iba al baño el Bélgica...Visitó, aprovechando el poco tiempo libre: Holanda, Francia, Italia, Inglaterra, Grecia, Turquía, Marruecos y bastantes ciudades españolas ....que para eso estaban en España.
Han sido 6 meses para Camille, que desde luego le han servido para obtener una experiencia inolvidable, mayor seguridad en sí misma, tener que convivir con otras personas y el conocimiento de otras culturas, otras gentes, otras formas de vivir, etc., y alejada de su zona de confort, le habrá supuesto una vivencia imborrable.
Hoy me he desprendido de la carga emocional mezcla de ansiedad-preocupación-miedo, que me tuvo entre otras cosas, al margen de la comunicación con vosotros.
LLEGO CAMILLE Y CON ELLA LA INSPIRACION QUE ME HABIA ABANDONADO POR LOS ULTIMOS 6 MESES.
13 DE JULIO 2016